domingo, 20 de mayo de 2012

Capítulo 8


Gracias por las firmas, me alegro mucho de que os guste la nove!! Voy lenta subiendo porque no está escrita la voy escribiendo día a día, y entre exámenes y demás tengo poco tiempoo! Espero tener el próximo prontoo se viene lo mejor prontooo! Firmeeeen!! y muchos besos y muchas gracias! (: 






Todo había pasado realmente rápido, de un instante al otro estaban de nuevo en aquella furgoneta cochambrosa. Ambos envueltos en un profundo silencio. Mientras Peter, que se había mantenido en silencio desde que la policía había detenido la paliza que le estaba dando a su ex amigo, conducía en silencio, a alta velocidad, más de la que probablemente estuviese permitida, y más de la que ese montón de chatarra podría soportar. Su cara, al igual que todo su cuerpo se encontraba aun tensa, con la misma expresión que minutos antes en la feria, como si aun pudiese recordar la desagradable imagen, como si estuviese reviviéndola una y otra vez. Al otro lado de aquel alargado sillón se encontraba Lali, quien después de todos los gritos y súplicas porque parasen, o porque alguien los ayudase, no había vuelto a pronunciar palabra. Estaba totalmente pegada a la otra puerta, abrazada a aquel enorme oso de peluche, encogida, y sin quitarle la mirada de encima a su acompañante. ¿Cómo se suponía que debía reaccionar a todo lo que había pasado? Por un lado estaba todo lo que había descubierto de Peter, la otra cara de la moneda de aquel chico dulce y de sonrisa compradora, por otro lado aquella forma en la que había saltado a defenderla, y por último esa agresividad que había conseguido asustarla. Ni siquiera quería pensar en que habría pasado si hubiese seguido pegándole así a aquel otro chico y nadie le hubiese parado.
-Bajá la velocidad, por favor –murmuró al cabo del tiempo, cuando su miedo por la velocidad a la que iban parecía borrar el resto de cosas que tenía en su cabeza. Pero el morocho parecía estar hipnotizado por la oscura y solitaria carretera por la que iban –Peter disminuí la velocidad, por favor, escuchame, bajá, vamos a matarnos si seguís así –volvió a insistir subiendo el tono, con una voz temblorosa, parecida a cuando le suplicaba que parase, y no lo hizo. Aquello parecía lo mismo, solo que si esta vez no para iban a ser ellos los que no lo contarían -¡Peter pará! –gritó finalmente con los ojos húmedos y la voz quebrada.
Peter, quien parecía estar totalmente cegado en la carretera, ido en sus pensamientos, con las manos apretadas con fuerzas contra el volante y su pie sobre el acelerador, como si de aquella forma se estuviese sacando la bronca que sentía al igual que pegándole al otro chico. Sí, quizás era su principal problema, no saber cuando parar, no poder, era algo que nunca podía, y era el foco de sus principales problemas. Pero esta vez algo pasó, que hizo que empezase a bajar la velocidad, ese grito rogándole, en aquel tono cargado de miedo, hizo que se estremeciese y que se le encogiese el pecho. Suspiró sin ni siquiera mirarla, pasándose una mano por los ojos, que más tarde se deslizó por su pelo, despeinándose un poco este.
Lali abrió los ojos al sentir como la velocidad bajaba, llevando de nuevo la vista hacia él. Dudó bastante el que hacer o decir. Finalmente, estiró los dedos soltando aquel enorme oso de peluche, y lentamente comenzó a gatear por el sillón en dirección hacia él. Cuando estuvo lo suficientemente cerca, llevó una manito con cuidado hasta su brazo, deslizando los dedos por este. No fue hasta que sintió un cosquilleo recorriéndole todo el cuerpo, a causa de aquella caricia por parte de la petiza, que Peter se dio cuenta de que ella estaba ahí, con él. Lali sonrió flojito de lado, al ver como la piel de este se erizaba, y que la tensión que tenía iba disminuyendo. Apoyó la barbilla en su hombro y lentamente dejó un beso en su mejilla. Era increíble, como un gesto tan simple pero tan tierno como ese, podían hacer que toda la tensión de su cuerpo desapareciese, al igual que toda aquella bronca, y solo quedase dentro una sensación de bienestar, como si todo lo que necesitase para estar bien fuese eso, a ella. Entonces, él, cerró los ojos un instante, antes de volver a llevar la vista a la carretera, mucho más tranquilo que antes. Despegó uno de sus brazos del volante, llevando su mano al hombro de ella, y deslizando su mano de un hombro al otro con mucha delicadeza, abrazándola después contra él. La, no necesitó más respuesta que aquella, era increíble como podían comunicarse sin más, sin pronunciar ni una sola palabra, pero sabían perfectamente que necesitaba el uno y el otro.
El resto del camino se hizo más corto y mucho más tranquilo. Lali abrazada a él, y envuelta por su brazo había terminado por dormirse así. Mientras, Peter, quien ahora conducía tranquilo, abrazándola, y en vez de pensar en lo que había pasado, no podía quitarse de la cabeza aquella última imagen de ella, como no podía dejar de mirarla a cada tanto, ahí dormida, tan linda, tan tierna. En aquel momento hubiese deseado que aquel viaje no se hubiese terminado nunca, que nunca llegara el destino, que nunca amaneciese.
Pero ya estaban en la ciudad, cada vez las calles se le hacían más conocidas, el barrio de siempre, hasta que finalmente estaban aparcados en la calle de aquel bloque en el que ambos vivían. Paró el motor del coche, y se quedó unos segundos mirándola, con una sonrisa inconsciente que había aparecido en su cara. –La, despertate, ya estamos acá –Murmuró llevando la mano libre hasta su pelo, y lo acarició con cuidado
Lali tampoco dormía profundamente, por lo que no tardó mucho en volver a la realidad al escucharle, aunque sí tardó un poco más en abrir los ojos, por disfrutar un poco de aquel mimito. Finalmente abrió los ojos, y bostezó, soltando un pequeño gritito similar al de una nena pequeña, mientras se estiraba. Llevó una manita a su boca, y después pasó la misma por sus ojos. Después apoyó la cabeza de nuevo sobre él, sonriendo al mirarle.
-Buenos días –bromeó, mientras aun se frotaba los ojos con una mano -¿Dónde estamos?
-Te traje a tu casa, es demasiado tarde para volver al colegio, me da a mi –encogió los hombros, llevando la vista a la calle
-Gracias
-No hay de que, total, también tenía que venir acá, te recuerdo que me tenés más cerca de lo que pensás. Te va a costar bastante perderme de vista –bromeó, llevando la vista a ella guiñándole un ojo
-Gracias, por secuestrarme –aclaró sonriendo de lado
Peter alzó las cejas al escucharla, al contrario que eso esperaba cualquier protesta, replica, reto, pero no un “Gracias” y menos después de cómo había terminado la noche. Fue entonces cuando volvió a recordar todo.
-No debí haberte llevado la, perdoname, podría haberte pasado…
-Me pediste que confiara en vos –le cortó, sin dejarle terminar la frase, incorporándose –me prometiste que con vos nunca me pasaría nada
-Ya sé lo que dije, pero…
-Yo confío en vos –volvió a interrumpirle, posando un dedo sobre sus labios para que dejase el tema
Peter sonrió y asintió con la cabeza.
Llevó su mano hasta la de ella, agarrándola, y dejando un beso sobre esta antes de apartarla de su boca, y sin soltarla, con la mano libre abrió la puerta, se bajó del auto, y la ayudo a ella a bajar. Caminaron agarrados de esa mano hasta el portal. Entonces Lali se soltó, se apoyó de espaldas contra el portal rebuscando en el bolso las llaves. Cuando al fin las encontró, antes de girarse, subió la mirada a él, dándose cuenta ahora de la poca distancia que había entre ellos, y que prácticamente estaba acorralada entre él y la puerta. Subió la vista hacia él, viendo la nariz aun ensangrentada.
-¿Te duele? –preguntó, llevando una manita a su cara, y dejando pequeñas caricias por alrededor, dónde antes había caído más de un golpe
Peter, entrecerró los ojos al sentir sus caricias. Intentando hacerse el fuerte, negó con la cabeza, y aunque alguna le hiciese mostrar pequeñas muecas de dolor, podría quedarse así toda la vida.
-Pasé mucho miedo –murmuró, bajando la vista al ver como era ahora la mirada de él la que se clavaba en sus ojos –por vos
-¿Por mí? –preguntó sorprendido. Cuando escuchó esas primeras palabras, volvió aquel desagradable recuerdo, pensando que se refería a aquello, pero esto era algo nuevo
-Si, por vos –asintió con la cabeza subiendo la vista a sus ojos –Cuando te vi ahí en el suelo, a las piñas…-negó con la cabeza, prefiriendo no recordarlo
Peter sonrió, y llevó una manita con cuidado a su carita, deslizando un dedo con cuidado por esta
-Creo que lo mejor será olvidar esa parte de la noche ¿si? Te prometo que nunca vas a tener porque volver a pasar por algo así –sonrió llevando la otra mano también a su cara, esta deslizándola para apartar un mechón de pelo que caía por su cara, llevándolo tras su oreja
De cuando sintió, en un primer momento su mano se deslizaba por su cara, como si se derritiese, con aquello estaba dejando de ser persona. Sentí sus manos sudando apretando con fuerza el osito, sus piernas temblorosas, como si de un momento al otro se fuese a venir abajo y podía escuchar su corazón latiendo con fuerza.
-Igual, no me olvido de todo, me vas a tener que compensar bastante ¿eh? –bromeó alzando un dedo, soltando una pequeña risita, más nerviosa que de otro forma. De alguna forma tenía que salir de aquel momento romántico, y aquello fue lo primero que se le pasó por la cabeza, aunque se arrepintió nada más pronunciar las primeras palabras. Era una experta en meter la pata cuando estaba nerviosa.
-¿Compensar? Mirá vos –comentó en el mismo tono que la morocha, sonriendo con diversión
-Mirá que ni con ochocientos mil besos te va a dar ¿eh? –continuó ella, al ver como no se había tomado para nada mal su corte
-¡A bueno! Estamos exigentes –bromeó alzando las cejas con diversión -¿Y si cambio todos esos miles de besos por uno?
-¿Por uno? –preguntó dudosa, notando como aquel tono ya no parecía tan en broma como antes
Esta vez Peter simplemente asintió con la cabeza. Dio un pasito más hacia ella, encontrándose totalmente pegado a ella, y fue acercando su cara lentamente a la de ella. Sus dedos seguían acariciando su cara con delicadeza, y su mirada estaba clavada en sus labios. Podía haber besado a miles de chicas en su vida, pero aquello era totalmente distinto, no quería besarla por una simple atracción o por pasión, que también la había, la sentía como no la había sentido nunca, pero sentía algo más, algo que hacía que un cosquilleo le recorriese el estómago a medida que se acercaba a ella, que todo le temblase cuando su nariz comenzó a rozar con la suya y que su corazón se acelerase cuando sus labios rozaron con los de ella.
-Pe..ter…no –murmuró como pudren un tono tan bajo que si no estuviesen así nunca podría haberla escuchado, obligándose a sí misma a volver en sí
-¿Por qué? –susurró en aquel mismo tono, abriendo los ojos, clavando su mirada en la suya
-Porque…porque…- ni siquiera ella sabía ese porqué, y menos lo iba a saber si seguía así, sintiendo sus labios en los suyos con cada letra que pronunciaba, y cada vez se estaba poniendo más y más nerviosa. Finalmente terminó bajando la cabeza
-¿Qué pasa, La? –preguntó bajito, sin entender su reacción, separándose un poco –Si, es por lo que dijo Agustín, ¿es por eso? –preguntó llevando la mano a su mentón, obligándola a mirarle
-No, o si, o –negó con la cabeza, volviendo a apartar la mirada, pues mirándole era imposible pensar algo en claro -¿Es verdad? ¿Hacés eso con las chicas?
-Si –murmuró después de un instante de silencio, bajando la mirada avergonzado
Lali asintió con la cabeza, manteniéndose en silencio, mirando a otro lado
-Pero las cosas han cambiado, La, con vos la cosa no va a ser así –aclaró, pero el silencio en la morocha se mantuvo –se que he sido un tarado, y una basura con todas las chicas con las que he estado, pero porque nunca me ha importado ninguna –encogió los hombros sin saber ya como excusarse y a la vez no meter la pata, no decir algo que pudiese estropear más todo –con vos no va a ser así, vos si me importás, vos sos mi amiga
Buenísimo, si justo buscaba algo para no estropear todo, tomó el peor camino que pudo tomar. Cerró los ojos, arrepintiéndose al toque de sus palabras, más al ver la cara de la morocha. El ceño frucido y los brazos cruzados sobre el pecho.
-A buenísimo, te importo porque soy tu amiga, pero me querés besar –negó con la cabeza –sos el mismo mujeriego, y la misma basura, te hacés el amigo para cambiar la estrategia es eso, y al final solo querés eso, lo que quieren todos
-No, La, pará, no quise decir eso, no saqués las cosas de quicio por un beso –alzó las manos dramatizando bastante todo –si hubiese querido lo mismo que con todas, ni me esforzaría en llevarte a sitios ni nada, porque una vez que me hubiese acostado con vos me habría aburrido y me habría ido a por otra –abrió los ojos como platos al escucharse a sí mismo, dándose con la mano en la cabeza –Tampoco quería decir eso Lali, lo que quiero decir es que no sos cualquiera para mí, que sos mi amiga, que me importás, y que es un beso no más. ¡Ni que te hubiese pedido matrimonio! –Volvió a dramatizar, exagerando más que antes.
La cara de Lali había empeorado de forma notable de un momento al otro, y más cuando escuchó aquel ‘plan base’ que tenía con todas, lo que hizo que su enojo creciese más aun, y más cuando volvía a pronunciar aquello de la amistad. ¿Por qué le jodía tanto aquello? Parecía como si le jodiese más el hecho de ser una simple amiga, a ser una más de sus chicas, ¿qué tenían las demás que no tenía ella? ¿por qué no se fijaba en ella como mujer?
-Para mí un beso es algo más serio, no se juega con un beso, y mucho menos es un ajuste de cuentas entre amigos –comentó en un tono desagradable, bastante serio y con la mirada clavada en el suelo
-Pero, ¿por qué te enojas? Es solo un beso
-Pasa, que lo que para vos es solo un beso, vos que te reís te todo, para los demás es algo más, una muestra de amor –bajó el tono a lo último, sintiéndose algo ridícula al decir aquello –Quizás sos demasiado pendejo para entender eso

7 comentarios:

  1. Lina (@Lina_AR12)20 de mayo de 2012, 3:19

    muy bueno,y para cuanto dio q hablar un beso,no.
    muy bueno

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  2. muuuy buenn cappp!!!! Mas noveeeeee!!!!!

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  3. maaaaaaaaaaaaaassssssss

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  4. me encantaaaaaaa quiero mas :D
    @Teen_Angels94

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  5. MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE MAS NOVE

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  6. maaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaasssssss

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  7. Mas mas mas me encantaaaaan quiero laliter ya porfavor!

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